En las últimas entradas he hablado sobre el cacheo de datos con memcached y de ciertas flexibilidades en arquitecturas que no me gustan.
Pero con respecto a estos dos temas si hay una flexibilidad que me gustaba, aunque no he podido ponerla en práctica, por incompatibilidades de producto o más bien versiones de producto.
Uno de lo problemas que tiene el empleo de memcached, y otras soluciones similares, es que debes codificar el acceso a la caché. Eso implica que si quieres cambiar de opinión tienes que modificar el código y pasar por el consiguiente ciclo de pruebas.
En cambio con tecnologías como hibernate y JPA es posible hacer que ese cache sea transparente a nivel de código fuente, simplemente indicando en el fichero de configuración que tablas quieres cachear.
Esto permite cambiar de opinión con mucha mayor facilidad y cachear o descachear ciertas tablas según va evolucionando el uso de la aplicación.