¿Porque hay tantas asociaciones?

Hace ya mucho tiempo que me regalaron un bonsai, concretamente un olmo (de ahí lo de olmito).

En una de estas charlando con otro bonsayista amigo y con algunos años más que yo, le comentaba que no entendía porque había tantas asociaciones. El me comentó que en las asociaciones hay gente que comparten un único punto en común, en este caso el bonsai. Pero en esas asociaciones hay personas de muy diferente condición, como el mundo mismo, con mas o menos poder adquisitivo, con mas o menos estudios, con diferencias opiniones políticas, etc. y eso suele provocar roces y escisiones.

Las empresas al final no son muy diferentes en estos aspectos de una asociación, hay mucha gente cada uno de su padre y de su madre. Lo malo es cuando esta lógica diversidad se desmadra y no se gestiona bien.

Siempre hay personas con las que tienes más o menos afinidad, pero cuando las personas empiezan a tomar decisiones de trabajo por motivos personales en vez de por motivos profesionales las cosas suelen acabar mal.

He sido testigo, con tristeza, de varias situaciones en las que ciertos responsables no decían nada a una persona de su equipo que estaba haciendo unas chapuzas inmensas, pero que era de su «cuadrilla», pero ponía a bajar de un burro a otra persona que hacia su trabajo perfectamente, simplemente por «molestarle» con alguna pregunta.

Ni que decir tiene que esos proyectos no acabaron nada bien…

Esto entronca perfectamente con los planteamientos de marca persona. Al final hay que cuidar tu imagen (tu marca) porque las chapuzas que hagas te irán acompañando por las empresas por las que vayas pasando. Es muy ingenuo pensar que con cambiar de empresa todo se evapora.